Usarás 3-4 rebanadas para esta receta y con las que te sobran puedes preparar esta receta deliciosa: ensalada de pollo con tocino y macadamias.

Pica las rebanadas de tocino lo más finamente que puedas, esto ayuda a que el sabor se esparza por toda la masa, pero también te ayudará en el momento de extender la tortilla.

Cuando las piezas de tocino son muy grandes podrían afectar el grosor de la tortilla y podría romperla también. Deja aparte.

En un tazón mediano combina harina, grasa del tocino (ya sea firme si la has estado acumulando, o líquida si acabas de freír el tocino), sal y agua hirviendo.

Revuelve con una cuchara de madera primero, recuerda que el agua está muy caliente, hasta la grasa del tocino se haya o derretido o integrado.

Añade el tocino picado y con una mano sigue amasando hasta lograr una bolla ligeramente húmeda y elástica, que se despegue de tu mano fácilmente. Esto tomará aproximadamente 8 minutos

Nota importante: El clima afecta la textura de la masa. En días lluviosos o húmedos la masa podría estar más húmeda de lo normal, si después de amasar unos 5 minutos notas que la masa sigue húmeda y muy pegajosa, agrega una cucharadita de harina y sigue amasando.

Repite de ser necesario, pero ten cuidado de no agregar mucha harina porque eso podría hacer que tus tortillas queden secas y duras al cocerse. La masa debe sentirse ligeramente húmeda. Procura no agregar más de tres cucharadas.

Y al contrario, en días muy calurosos o secos la masa podría requerir de más agua. Agrega de cucharadita en cucharadita.

Recuerda que la práctica hace al maestro, conforme hagas más y más tortillas identificarás cual es la textura ideal.

Divide la masa en el número de tortillas que desees, la información nutricional y las fotos en esta receta es para tortillas de tamaño regular, pero tu puedes hacerlas más pequeñas o más grandes. Revisa la tabla de arriba en el contenido del blog.

Recomiendo que uses una báscula de cocina para que todas te salgan del mismo tamaño, esta es la báscula que yo tengo, pero hay muchas otras con diferentes precios.

Si no tienes una considera comprarla la usarás mucho, te lo aseguro. Si no tienes y quieres hacer la receta ¡pero ya! puedes dividir la masa al tanteo.

Crea bolitas o testales y colócalas sobre una superficie ligeramente enharinada, cúbrelas y déjalas reposar por 30 minutos.

El reposo es importante porque permitirá que se desarrolle el gluten que le da elasticidad y consistencia a la masa. Además será más fácil formarlas.

Escoge una superficie lisa y plana, puede ser una mesa, una tabla de madera o sobre tus cómodas de cocina. Enharina ligeramente tu superficie de trabajo y el rodillo.

Toma una de las bolitas o testales y con el rodillo, extiende la tortilla de arriba a abajo ejerciendo un poco de presión, luego girala y extiende nuevamente de arriba a abajo. Ahora voltéala y repite.

Al voltearla la harina de la superficie ayudará a que no se pegue al rodillo. Procura no añadir más harina ya que si añades mucha la tortilla tendrá una textura seca.

Sigue extendiendo de arriba hacia abajo y girándola o volteándola hasta que logres el grosor y diámetro deseado. Repite.

Recomiendo que extiendas sólo las que tu espacio en tu cocina te permita sin ponerlas una sobre otra, ya que de otra forma se pegarán entre ellas y tendrás que extenderlas de nuevo.

Yo generalmente extiendo tres y luego mientras espero que una se cueza, extiendo la siguiente.

Nota: No esperes que las tortillas te queden redondas al primer intento, eso requiere de práctica. Pero no importa su forma, sabrán igual de ricas.

Calienta el comal a temperatura media alta y coloca la primera tortilla. En mi experiencia la primera tortilla nunca sale bien, es la prueba para ver si la temperatura de tu comal es la apropiada.

Cuando observes que la superficie ha cambiado de un tono blanquecino a un tono amarillento se empiezan a formar burbujas, voléa la tortilla. Esto llevará, dependiendo de tu estufa y comal entre 45-55 segundos.

Espera otros 40-45 segundos para cocinar el otro lado. Voltea nuevamente y cuece por 10-25 segundos. Es en este segundo volteado que verás algunas de las tortillas inflarse.

Retira la tortilla y coloca en una toalla de tela de cocina o tortillero para mantenerlas calientes. Repite hasta que termines con todas. Y ¡a disfrutar!